Ilya Asher Maverick –Light–

De pequeño Light soñaba con que sus aciertos fueran festejados de la misma manera que los de su hermano. Anteriormente Light solía deprimirse demasiado por el hecho de que a la gente no le importa lo que alguien haga por ellos y suelen querer todo sin dar nada a cambio. Deseaba ser tratado de igual manera que aquellos que tenían los recursos, pero nunca lo logró, siempre importaba más el valor monetario que tenías a cualquier otra cosa. Después de todo lo que le pasó se dio cuenta que en realidad esos deseos no valen para nada y cada quien es capaz de hacer lo que puede. No le gusta hacer las cosas de manera precipitada, hay más tiempo que vida. Cada que tropieza intenta ver la mejor manera para levantarse con más equilibrio que antes para que a la próxima eso que lo hizo trastabillar después no le cause problemas. Intenta pasar por los obstáculos que tiene en frente, sin desviarse ya que en algún punto de su vida lo volverá a pasar y tal vez después sea más difícil de superar.

No le gusta perder, ciertamente, pero tampoco le gusta hacer el ridículo por ser tan necio por lo que si se da cuenta que no tiene razón prefiere mantenerse callado y no hablar más sobre el asunto. Le cuesta trabajo aceptar sus errores y cuando deja de hablar es cuando ha aceptado su derrota, en silencio. Sabe que no es el que sabe más ni tampoco es el más estúpido, pero igual a veces la derrota duele más de lo que uno desea admitir, así que es mejor aceptarla en silencio a estar negándolo o gritando a los cuatro vientos que uno se ha equivocado.

Amante de la sabiduría, nunca se sabe demasiado y es por eso que siempre que puede lee. Le agrada también escuchar las historias que pueda, así que si encuentra algún viajero que esté contando alguna historia –ya sea falsa o verídica– él no dudará en sentarse junto a él, sin importar si es el único que lo hace. Es bastante observador y se fija en cosas a las que la mayoría no presta atención; eso le ayuda bastante a llegar a conocer a las personas y a adivinar sus intenciones. Se da cuenta de detalles que otros harían a un lado, pero es que todo importa y es un error pensar que no es así.

Hace mucho le importaba lo que los demás pudiesen pensar de él, pero ahora mismo eso no podría importarle menos. Si piensa algo lo dice, sin importar nada ni lo que piensen los demás. Cada quien ve por su bien y no le agrada molestar a los demás con sus problemas, ya que no le agrada ser una carga para nadie. Sabe que en realidad a nadie le interesa cómo es que se siente así que prefiere mostrar que nada pasa aunque esa no sea la verdad, además de que le molesta que otros se metan en sus problemas.

Si bien no es una persona violenta tampoco es de los que se deja golpear y se queda observando, pero prefiere no ser parte de este tipo de actos. Si tiene algún problema con alguien prefiere resolverlo de una manera tranquila y evitar usar la violencia ya que eso sólo empeora las cosas en lugar de mejorarlas. Es bastante explosivo y temperamental, se enoja con facilidad y es difícil poder controlarse en ese momento, es por eso que no le agrada meterse en discusiones. No es una persona que considere a mucha gente como sus enemigos ya que considera que es darles demasiada importancia y no lo merecen.

Casi nunca siente remordimiento por algo que hace y la palabra ‘arrepentimiento’ no existe en su vocabulario. Prefiere asumir las consecuencias de sus actos a estar llorando por lo que ya ha pasado y que no podrá cambiar. Se avergüenza de su pasado, aunque tampoco le agrada demasiado su presente, prefiere vivirlo de la mejor manera posible y sin estar llorando por cosas que ocurren en la vida, que momentos tristes siempre habrán. Como cualquier persona tiene sus momentos de fragilidad, pero jamás los mostrará. Prefiere callar y buscar una solución a llorar y perder tiempo que es demasiado preciado. Entiende que cada quien tiene su forma de pensar, pero es una molestia que por esa excusa las cosas le afecten a él, así que si hay algo que no le agrada prefiere mantenerse alejado para evitarse problemas y disgustos.

Nunca se ha enamorado y nunca lo hará. Ese tipo de emociones son las que se construyen cuando se cree que algo mejor les puede deparar el futuro estando juntos. El darle su corazón a alguien supone darle armas a alguien que antes no tenía ya que las emociones son algo fuerte. Él sí cree en el amor y precisamente por eso es que toma las precauciones necesarias para no cometer tal acto. Claro que todavía tiene sus necesidades y habrá alguna que otra chica con la que ha tenido que ver, pero es raro que sea con la misma persona durante más de una semana. No le agrada estar demasiado acompañado ya que, aunque no lo quiera, empieza a encariñarse y ese es un problema el cual no puede darse el lujo de tener.

Tiene amistades, pero ninguna demasiado importante o indispensable para él. Tiene sólo del tipo que puede ayudarle en algún sentido; no es que sea aprovechado tampoco y si puede ayudar a alguien lo hace, pero prefiere tener bien marcadas las diferencias entre cada individuo. No le agrada tener que decir: "Si no está tal persona entonces no puedo hacer nada", le gusta más bien valerse por sí mismo y demostrar que puede hacer las cosas solo, que ha cambiado y ahora es lo suficientemente fuerte como para no necesitar de nadie más que de sí mismo.

Ilya nació originalmente en una familia polaca con pocos ingresos y demasiadas deudas. Es por esto que siempre cambiaban de ciudad, sin tener un lugar fijo dónde dormir ni un ingreso fijo que les permitiera comer. Vivían del robo e Ilya aprendió a hacerse astuto por esto y a desconfiar de todos. Cabe mencionar que Ilya no nació siendo ciego, sino que algo más provocó este estado. Su hermana Aitana nació cuando él tenía seis años ocasionándole al inicio recelo, pero después un amor infinito hacia ella, aunque no solía expresarlo de manera correcta ya que no sabía cómo hacerlo. Un año más tarde nació su otra hermana, Valeria, aunque esta felicidad se vio opacada debido a que su madre murió por causas aparentemente misteriosas, aunque en el fondo sabían que había sido por el nacimiento de Valeria.

A partir de aquí fue que su padre empezó a batallar mucho más con el dinero y la forma de poder mantener a sus hijos. Hubieron incluso veces en las que ninguno de los cuatro comía por tres días seguidos. Fue entonces que una 'oportunidad' cayó del cielo para Said: vender drogas. Al inicio todo iba viento en popa y la economía aumentaba, pero Said fue estafado y le robaron varios paquetes que costaban varios miles –o hasta millones– de euros. Se dedicaron tres meses a huir de los que querían cobrarle el dinero, corriendo de ciudad en ciudad; pero a los narcotraficantes no se les puede engañar. Les encontraron y acribillaron; Ilya logró sobrevivir, pero fue capturado y torturado con todo tipo de cosas. Ocasionándole las cicatrices, quemaduras que quedará permanente en él.

Después de dejarle de esta manera decidieron liberarlo. Las primeras semanas fueron terribles para él siendo que nunca había tenido que valerse por sí solo de esa manera.. Fue entonces que una campaña de gente que suele intentar salvar a niños sin familia le encontró y le puso en adopción. Ilya en esos momentos no quería más que morir, dejar de existir para así dejar de sufrir, desde entonces le tiene temor al sufrimiento ya que no podría aguantar volver a sentir algo así.

Él tenía 14 cuando fue recogido y a los 15 fue adoptado por una familia bastante adinerada. Al parecer eran bastante conocidos, aunque él no sabía de quiénes se trataba siendo que él nunca había jugado algo parecido a un videojuego. Desde entonces su vida dio un giro completo, mejorando cada vez más.

Se lleva bastante bien con su familia actual, aunque esconde cosas que ni ellos saben. Esto le carcome por dentro, pero lo hace a propósito; su padre y su madre le tienen tanto cariño que le eligieron a él para ser el líder en lugar de a su hija legítima. De alguna forma odia esto ya que siente que es una manera de mostrar lástima hacia él y, por otro lado, agradece infinitamente que sean tan amables con él cuando no lo merece.